Valle de Cocora por libre. Las mejores rutas y cómo llegar

El Valle de Cocora es uno de los destinos más impresionantes de Colombia. De hecho es, probablemente, el plato fuerte de un viaje por el país, ese destino que recordarás especialmente por encima de otros. Si Colombia tuviese una maravilla del mundo, sería esta. Famoso por sus imponentes palmas de cera, el árbol nacional del país, este valle ubicado en el corazón del Eje Cafetero ofrece paisajes únicos. Si estás buscando explorar este hermoso lugar por tu cuenta, en esta guía te compartimos las mejores rutas para recorrer el Valle de Cocora por libre y cómo llegar de manera sencilla.

Palmeras de cera en el Valle de Cocora.

Día 10. Recorriendo el Valle de Cocora

Llegamos al ecuador de nuestro viaje por libre en Colombia con uno de los platos fuertes, el Valle de Cocora. Amanecimos temprano en el alojamiento de Salento, Hotel Jardín, del que ya te hablamos en la entrada sobre qué hacer en Salento. Tomamos el desayuno que teníamos incluido y nos pusimos en marcha.

Lo más habitual es llegar al Valle de Cocora desde Salento, a 11 kilómetros y 20 minutos de recorrido. Las opciones para cubrir este trayecto son principalmente dos, un coche de alquiler o un Willy. Si quieres saber cómo llegar a Salento, te dejamos aquí la entrada que hemos escrito dedicada a ello.

Nosotros, pese a que teníamos el coche de alquiler, preferimos pagar el Willy. ¿Por qué? Porque ya lo probamos el día anterior para visitar una finca cafetera y nos pareció una experiencia muy divertida. Eso sí, nos gustaba ir de pie en la parte trasera del vehículo. Si vas en el interior, puede que vayas demasiado apretado, ya que es normal que lo llenen hasta el límite. Si lo de ir subido atrás no te llama la atención y dispones de coche, escogeríamos sin duda la segunda opción.

Los Willys se cogen desde el punto que puedes encontrar en el mapa como Willy Jeep Transport, donde hay una taquilla improvisada en la que comprar tus billetes. No obstante, te recomendamos que preguntes el día anterior porque puede que cambien de lugar. El precio rondaba los 6-7€ ida y vuelta. La compra no se hace para una hora específica, si no que te pondrás a la cola de la gente que ya esté esperando y subirás cuando te toque. Si no recuerdo mal, salen desde las 7:00-8:00, y vuelven hasta el atardecer, cada pocos minutos. En cualquier caso, te recomiendo también que te informes allí.

Willy para ir al Valle de Cocora.

El Willy te dejará en el parking, punto al que tendrás que volver una vez finalices tu recorrido para hacer la cola para montarte en el vehículo de vuelta. Si no quieres visitar el Valle de Cocora con demasiada gente, cosa que siempre resta encanto a estos paraísos naturales, intenta madrugar e ir en los primeros. Nosotros fuimos a la «estación» sobre las 7:30, y nos montamos en el jeep algo antes de las 8 de la mañana.

Si prefieres ir en coche, hay aparcamientos en la zona, aunque no sabemos cuál es el precio. Según hemos leído, puedes también dejarlo en alguno de los restaurantes a cambio de comer a la vuelta. Respecto a la carretera, pese a tener algún tramo malillo, se puede recorrer perfectamente con cualquier vehículo.

El Valle de Cocora ofrece a los visitantes la maravillosa experiencia de conocer sus laderas, palmerales y bosques haciendo alguna de los senderos acondicionados para ello. Los caminos son principalmente 2, un sendero largo y circular de unos 12 kilómetros, al que puedes añadir el paseo hasta la Reserva Colibríes, y una ruta más corta que se centra en la zona más famosa, la de las palmeras de cera.

Mapa del Valle de Cocora.

Llegamos allí poco después de las 8 de la mañana. Aunque es un espacio natural, el valle tiene un precio de entrada. No recuerdo cuánto costaba, pero sí que había que pagar un par de veces. La primera sería el precio oficial, mientras que al final del recorrido un lugareño ha aprovechado que la ruta cruza su parcela para cobrar a los visitantes por pasar. Creo que en total pagamos alrededor de 4-6€ por persona.

Nosotros teníamos claro que haríamos la ruta larga. No siempre se está en un lugar como este, así que qué mejor que dedicarle al menos medio día para conocerlo bien. Aunque 12 kilómetros puede parecer mucho, se suele tardar en recorrer entre 4 y 6 horas, no es difícil.

Como es una ruta circular, puedes hacerla en ambas direcciones. Eso sí, en nuestra opinión, hay una que es claramente la mejor: en el sentido de las agujas del reloj, es decir, pasando por la zona de las palmeras al principio. Para ello, tendrás que dirigirte hacia la izquierda una vez el Willy te deje en el estacionamiento. En el mapa de arriba, sería recorrer primero los caminos izquierdos y bajar por los de la zona derecha.

Sendero del Valle de Cocora.

¿Qué por qué pensamos que es la mejor? Por 2 motivos. El primero es que es menos dura. Ten en cuenta que subirás desde los 2400 metros hasta una altura próxima a los 3000 metros. Si lo haces como te decimos, tendrás un sendero con subidas mucho más progresivas, sin grandes pendientes. Si lo haces al revés, tendrás que afrontar caminos empinados que requerirán de cierta forma física. El segundo motivo es que llegarás a las palmeras de cera antes. Cierto es que puedes pensar que por qué no dejar lo mejor para el final, pero es que esta zona se llena mucho según se va acercando el mediodía. Así que ir allí cuanto antes te permitirá disfrutar del fantástico paisaje sin mucha gente.

Respecto a la ruta corta, se centra en la zona de las palmeras de cera. Consistiría en seguir las flechas rojas de subida hasta el mirador 2, y bajar por el camino marcado con las flechas azules. Si no dispones de tanto tiempo, o te parece que puede ser demasiado camino para ti los 12 kilómetros de la larga, es una muy buena opción para llevarte de recuerdo las imágenes más bonitas de la zona. Se puede recorrer fácilmente en una hora y media ida y vuelta.

Una vez dejado claro en qué sentido hacer el sendero, te contamos un poco cómo es el camino. Está claramente indicado y es muy fácil seguirlo. Entramos por el punto marcado en el mapa como «Entry» y seguimos el camino de las flechas rojas. Puedes ir por el camino marcado con flechas azules, pero te saltarás la zona del «Bosque de Palmas». Ojo, no solo esta zona tiene las palmeras, sino que es el nombre que se le da. Aún así, merece mucho la pena explorarla.

Entrando al sendero Bosque de Palmas.

Este primer tramo es muy abierto, con paisajes que se pierden en la lejanía del valle. Fue de nuestros favoritos, y tardamos en hacerlo poco más de media hora. A las nueve menos veinte de la mañana ya estábamos en el primer mirador. El más famoso es el segundo, a 400 metros del anterior, y es desde el que se pueden sacar las imágenes más conocidas del Valle de Cocora.

Panorámica desde el Mirador 2.

Otras fotos que seguro que también has visto, y si no las verás, son las que te puedes hacer con un jeep, unas alas, una especie de cápsula de mimbre… Todo este «attrezzo» también se ubica en la primera parte de la ruta. Así, el tiempo que tardes dependerá bastante de lo que te entretengas sacando fotos.

Utilizando el «attrezzo» del Valle de Cocora.

Si continúas subiendo llegarás a la Finca la Montana. El camino sigue siendo bastante abierto, pero no tanto, y la exigencia es mayor al tener más pendiente. No obstante, en la Finca hay una casa que vende bebidas, así que viene genial si necesitas algo fresquito para reponerte del esfuerzo. A nosotros nos llevó una hora y media llegar hasta la finca desde el principio de la ruta.

Colibrí en el Valle de Cocora.

Por cierto, aunque no tomamos nada, ya que fuimos bien preparados con agua y algo de picar, nos quedamos un rato descansando, y pudimos ver varios colibrís acercarse a flores, ¡todo un espectáculo verlos suspendidos en el aire! Así que te recomendamos que estés atento.

A partir de aquí entrarás en el Bosque de Niebla, donde la vegetación empieza a estar más presente y el camino es más cerrado, sin unas vistas tan impresionantes como las de la primera mitad. Además, al menos durante nuestra visita, la zona hizo honor a su nombre, y una densa niebla avanzaba a nuestro alrededor. Caminarás por una zona más o menos llana hasta el desvío hacia la Reserva Colibríes.

Bosque de niebla en el Valle de Cocora.

La Reserva Colibríes es una cabaña en medio del bosque a la que los colibríes se suelen acercar a beber agua. Para llegar, tendrás que desviarte de la ruta unos 30 minutos, que hay que deshacer completamente a la vuelta. Nosotros decidimos qué hacer sobre la marcha. Habiéndolos visto ya muy de cerca como te comentábamos antes, decidimos prescindir de este punto. Calculamos que nos iba a llevar una hora y media entre llegar y disfrutar del lugar, lo que nos pareció excesivo para lo que habíamos leído que era.

Decidas o no visitar la casa de los Colibríes, tendrás que comenzar la bajada por el sendero que transcurre a ambos lados del río San José. En el caso de que vayas a hacer la ruta en la dirección opuesta, todo esto sería la subida. Gran parte de este camino atraviesa una zona de vegetación muy frondosa, ofreciendo un paisaje totalmente distinto al anterior. Durante algún kilómetro, las palmeras de cera desaparecerán, dejando paso a los múltiples puentes colgantes que te van llevando de una orilla a otra.

Puente colgante que cruza el río San José.

Es un camino diferente, con paisajes quizá más similares a los que puedes encontrar en muchos otros sitios, pero no por eso deja de merecer la pena. A nosotros nos llevó 1 hora llegar hasta la zona donde el paisaje se vuelve a abrir, y donde hay que pagar a la persona que debe ser propietaria del terreno.

Esta ya sería la última «etapa», en la que las palmeras vuelven a aparecer aunque desde la distancia. Aún así, nos encantó esta zona, mucho más tranquila que el Bosque de Palmas y con panorámicas espectaculares a todo el valle. Por cierto, recordad llevar efectivo para poder atravesar la propiedad privada. Nos entretuvimos bastante sacando alguna foto, así que nos tomó una hora llegar de nuevo al aparcamiento.

Última parte del sendero.

Por si quieres saber rápidamente cuánto puedes tardar en hacer la ruta larga, te dejamos resumido lo que nos llevó a nosotros, teniendo en cuenta que nos paramos a hacer fotos pero sin entretenernos demasiado.

  • Bosque de Palmas: 40 minutos.
  • Mirador 1 y mirador 2 hasta Finca la Montana : 50 minutos.
  • Parada en la Finca y Bosque de Niebla: 1 hora.
  • Reserva Colibríes: no lo hicimos, pero calculamos entre 1:15h y 1:30h.
  • Bajada por el río San José hasta el aparcamiento: 2 horas.

En total dedicamos a el Valle de Cocora cuatro horas y media, que pueden llegar hasta 6 horas si decides hacer una visita a los colibríes. Cuando llegues abajo, puedes comer en alguno de los restaurantes, como Donde Juan o Donde Kike. Nosotros preferimos volver a Salento, ya que nos daba la sensación, por las reseñas que leímos, que los restaurantes eran de más calidad en el pueblo.

Panorámica del Valle de Cocora.

Nuestro plan el resto del día era, tras comer en Salento, coger el coche para visitar el segundo pueblo de la ruta por el Eje Cafetero, Filandia, así que no teníamos tiempo que perder. Si quieres seguir leyendo el resto de la ruta por la región, te dejamos aquí la entrada.

Y hasta aquí nuestra experiencia en el Valle de Cocora. Sin duda, lo colocamos en el top 3 de las cosas más bonitas que vimos en Colombia. Si vas a hacer un viaje por el país, es un punto imprescindible que incluir. Como siempre, cualquier duda en los comentarios!

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