Visitar el estuario de hipopótamos de Santa Lucía

El Estuario de Santa Lucía, ubicado en iSimangaliso Wetland Park, es uno de los destinos más impresionantes de Sudáfrica para los amantes de la naturaleza y la vida silvestre. Hogar de la mayor población de hipopótamos en el sur de África y declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, este sitio ofrece una experiencia única para observar de cerca a estos gigantes acuáticos, así como a cocodrilos, aves exóticas y una rica biodiversidad. Si estás planeando una visita al Estuario de Hipopótamos de Santa Lucía, aquí te contamos todo lo que necesitas saber para disfrutar al máximo de este maravilloso ecosistema.

Dos hipopótamos en el estuario de Santa Lucía.

Día 10. Visitar el estuario de hipopótamos de Santa Lucía

Nos levantamos muy pronto en nuestro alojamiento de Santa Lucía, el African Dreamz GuestHouse. Teníamos la excursión a las 7:30 de la mañana, así que, sin tiempo para desayunar, nos fuimos hacia el muelle. Los alojamientos están acostumbrados a que los huéspedes no puedan cumplir con el horario del desayuno debido a esta visita, así que seguro que no te ponen problema en hacértelo a la vuelta.

Llegamos al embarcadero unos 15 minutos antes de la salida. Visitar el estuario de hipopótamos de Santa Lucía significa navegar por el estuario más grande de todo el continente africano, hogar de más de 800 hipopótamos y más de 1.000 cocodrilos del Nilo.

Que sepamos, hay dos empresas que hacen la excursión, Heritage Tours and Safaris y Advantage Tours. La primera ofrece una visita en un barco pequeño, para un máximo de unas 15 personas, bajito para estar más cerca de los animales y bastante silencioso. En cambio, la segunda tiene barcos más grandes, que hacen mucho ruido y mucho más masificados. Creo que no hace falta aclarar cuál recomendamos.

Otro aspecto a tener en cuenta es que en ambas vas con un guía que te contará curiosidades de la fauna y flora del estuario. Sin embargo, en Heritage lo hacen de manera «íntima», mientras que en Advantage parece que, según el sitio en el que te sientes, se complica escuchar bien por la distancia.

A la hora de reservarlo nosotros teníamos claro dos cosas, queríamos Heritage y a última hora de la tarde. Lo dejamos innecesariamente para el final y nos quedamos sin plazas. Después de leer opiniones, preferimos dejarlo para el día siguiente antes de hacerlo con la otra agencia, que sí que tenía plazas al atardecer.

En el barco de Heritage durante la excursión del estuario de hipopótamos.

Para las diferencias que hay entre una agencia y otra, sorprende que el precio es bastante similar. El tour con Heritage cuesta 380 RND (19€) y dura dos horas, mientras que el de Advantage sale por 320 RND (16€) y una duración similar.

En cuanto a horario, Heritage ofrece 5 salidas, que varían un poco en función de la época del año. Para chequearlo y no quedarte sin plazas utiliza su web oficial. Cuando fuimos nosotros, en agosto, salían a las 7:30, 9:30, 11:30, 13:30 y 15:30.

Como te hemos avanzado, hay hasta 5 alternativas para elegir la hora que mejor te venga. Nosotros lo hicimos a primera hora de la mañana mientras que el más recomendado y el que primero se llena es el de las 15:30.

En mi opinión, el mejor es el de última hora de la tarde, pero, también te digo, esa hora es la mejor para hacer cualquier actividad en Sudáfrica. Quiero decir, también es la mejor hora para hacer tus últimos avistamientos en iSimangaliso, como te contamos en nuestro post sobre visitar el parque. Así que, en caso de que tu itinerario sea similar al nuestro, la pregunta es si es mejor aprovechar tú único atardecer en Santa Lucía para una cosa o para la otra. Y la respuesta es muy subjetiva.

Cormorán de El Cabo secando sus alas al sol en el estuario de Santa Lucía.

Creo que si tu viaje consistiese solo en este día, quiero decir, no hay Kruger, Hlane y otros parques, dedicaría el atardecer a estar en iSimangaliso. Pero si, como nosotros, te quedan un montón de días de safari, ya tengo más dudas. Cualquier decisión puede ser buena o mala, así que déjate guiar por lo que más te apetezca. Sí que he de decir que en el estuario, además de ganar la luz del atardecer, en principio también deberías ver a los hipopótamos más activos que por la mañana.

Por cierto, si lo haces a primera hora de la mañana llévate algo de abrigo, porque una vez estés en el barco refresca más de lo que parece.

La verdad que no tiene mucho misterio. Antes de salir, el guía te hará una breve introducción del parque, historia, ecosistemas y demás información. Cuando esté todo explicado, comenzaréis el recorrido por el estuario.

Familia de hipopótamos en el estuario de Santa Lucía.

Según vayáis avanzando os iréis encontrando con familias de hipopótamos sumergidas parcialmente en el agua. El guía cuenta curiosidades sobre los animales, cómo se organizan, cómo se comportan, si estás observando machos, hembras, crías…

El barco se acerca bastante a los hipopótamos, aunque manteniendo siempre una distancia prudente. Que yo sepa el avistamiento está asegurado. Pese a que son animales salvajes y tienen libre movimiento, habitan en el estuario, así que estás en su casa. El otro gran atractivo del lugar es el cocodrilo del Nilo, pero no lo conseguimos ver.

Pareja de hipopótamos en el estuario de Santa Lucía.

Dependiendo de la suerte que tengas, puedes verlos más o menos fuera del agua. También debe influir la hora, ya que al atardecer se empiezan a activar. Nosotros, que fuimos por la mañana, los vimos durmiendo mayormente, a excepción de uno que sacó medio cuerpo para comer.

Tras haber recorrido unos 50 minutos de ida, dio media vuelta para deshacer lo hecho. Nos volvimos a parar al lado de alguna familia de hipopótamos a modo de despedida, y llegamos al embarcadero 20 minutos antes de que se cumpliesen las 2 horas. Pese a que teníamos la sensación de que había sido suficiente tiempo, sí que es verdad que tú estás pagando por una visita de una duración determinada.

Antes de contarte nuestra opinión sobre la actividad, te compartimos una serie de curiosidades sobre los hipopótamos para que te vayas familiarizando con ellos.

  • Los hipopótamos no nadan, caminan bajo el agua: A pesar de pasar gran parte de su vida en ríos y lagos, los hipopótamos no son realmente nadadores. En lugar de nadar, caminan o se impulsan saltando por el fondo del agua. Gracias a su gran densidad corporal, pueden hundirse fácilmente y moverse de manera sorprendentemente ágil bajo el agua.
  • Tienen sudor rosado que actúa como protector solar: Los hipopótamos secretan una sustancia que a menudo se describe como «sudor rosado». En realidad, es una secreción oleosa que actúa como un protector solar natural y como un antibiótico, protegiendo su piel sensible de los rayos del sol y de las infecciones cuando están fuera del agua.
Esto es lo más fuera del agua que vimos a un hipopótamo en nuestra excursión por el estuario de Santa Lucía.
  • Los hipopótamos son los mamíferos más peligrosos de África: A pesar de su apariencia tranquila y regordeta, los hipopótamos son muy territoriales y agresivos, especialmente si sienten que su espacio está amenazado. Esto los convierte en uno de los animales más peligrosos de África, responsables de más muertes humanas al año que muchos otros grandes depredadores, como leones y tiburones.
  • Pueden mantener la respiración hasta 5 minutos: Los hipopótamos pasan gran parte de su día sumergidos para mantenerse frescos. Son capaces de cerrar sus fosas nasales y aguantar la respiración bajo el agua por hasta 5 minutos antes de volver a la superficie para respirar, incluso mientras duermen, ya que su cuerpo lo hace automáticamente.
  • Su boca puede abrirse a casi 180 grados: Una de las características más impresionantes de los hipopótamos es su enorme boca, que puede abrirse casi 180 grados. Tienen poderosas mandíbulas y colmillos que pueden alcanzar hasta 50 cm de largo. Esta poderosa mordida, combinada con su temperamento territorial, hace que sean animales a los que conviene mantener a una distancia segura.

Para responder a esta pregunta voy a empezar por las cosas buenas. Es un lugar único, que te permite estar muy cerca de hipopótamos en libertad, experiencia difícil de tener en otros parques de Sudáfrica. El recorrido en barco es agradable y podrás disfrutar con los paisajes y la fauna y flora de los humedales.

Pese a ello, no diría que salí de allí encantado. Quizá se nos hizo un poco largo y el frío que pasamos por no ir bien preparados no ayudó. Aunque el contacto aquí con los hipopótamos es especial, tanto en iSimangaliso como en el resto de parque los vas a ver a montones. Además, nosotros no tuvimos suerte y no llegamos a ver a ninguno medianamente activo, por lo que fueron dos horas de, básicamente, ver ojos asomados en la superficie.

Dicho esto, ¿lo recomiendo? Pues diría que sí si tienes tiempo suficiente, pero en ningún caso lo destacaría como uno de los imprescindibles de un viaje a Sudáfrica. Por cierto, ya lo hemos comentado en el post de qué hacer en iSimangaliso, pero lo repetimos rápidamente. Si vas a pasar una noche en Santa Lucía, recomendamos salir con el coche a dar una vuelta nocturna, ya que es el momento en el que los hipopótamos están más activos y es fácil encontrarte alguno por el pueblo.

Terminada la excursión, volvimos a nuestro hotel a desayunar y recoger las cosas. Nos planteamos la idea de volver a entrar a iSimangaliso para conocer la sección oeste, pero decidimos que mejor no. Iba a ser para estar de 11:00 a 14:00 que son las horas en las que menos activos están los animales, así que pensamos que no iba a merecer la pena.

Nos despedíamos así de nuestro primer gran parque en Sudáfrica y poníamos rumbo a descubrir un nuevo país, Esuatini. Pero esto ya te lo contamos en los siguientes posts. Como siempre, cualquier duda en los comentarios!

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